Enseñanza y aprendizaje
Las tecnologías digitales pueden mejorar y mejorar las estrategias de enseñanza y aprendizaje de muchas maneras diferentes. Sin embargo, cualquiera sea la estrategia o enfoque pedagógico que se elija, la competencia digital específica del educador radica en orquestar de manera efectiva el uso de las tecnologías digitales en las diferentes fases y entornos del proceso de aprendizaje. La competencia fundamental en esta área, y tal vez de todo el marco, es 3.1: Enseñanza. Esta competencia se refiere al diseño, planificación e implementación del uso de tecnologías digitales en las diferentes etapas del proceso de aprendizaje.
Las competencias 3.2 a 3.4 complementan esta competencia al enfatizar que el potencial real de las tecnologías digitales radica en cambiar el enfoque del proceso de enseñanza de procesos dirigidos por el maestro a procesos centrados en el alumno. Por lo tanto, el papel de un educador digitalmente competente es ser un mentor y una guía para los estudiantes en sus esfuerzos de aprendizaje progresivamente más autónomos. En este sentido, los educadores digitalmente competentes deben ser capaces de diseñar nuevas formas, con el apoyo de las tecnologías digitales, para proporcionar orientación y apoyo a los alumnos, individual y colectivamente (3.2) e iniciar, apoyar y monitorear ambos autorregulados (3.4) y actividades de aprendizaje colaborativo (3.3).
Aprendizaje y Enseñanza incluye las siguientes competencias:
2.1. Enseñanza (página 52 del DigiCompEdu)
Planificar e implementar dispositivos y recursos digitales en el proceso de enseñanza, a fin de mejorar la efectividad de las intervenciones de enseñanza. Para gestionar adecuadamente y orquestar estrategias de enseñanza digital. Experimentar y desarrollar nuevos formatos y métodos pedagógicos para la instrucción.
2.2 . Orientación (página 54 del DigiCompEdu)
Utilizar tecnologías y servicios digitales para mejorar la interacción con los alumnos, individual y colectivamente, dentro y fuera de la sesión de aprendizaje. Utilizar las tecnologías digitales para ofrecer orientación y asistencia oportuna y específica. Experimentar y desarrollar nuevas formas y formatos para ofrecer orientación y soporte.
2.3. Aprendizaje colaborativo (página 56 del DigiCompEdu)
Utilizar tecnologías digitales para fomentar y mejorar la colaboración de los alumnos. Permitir a los alumnos utilizar las tecnologías digitales como parte de las tareas colaborativas, como un medio para mejorar la comunicación, la colaboración y la creación de conocimiento colaborativo.
2.4. Aprendizaje auto-regulado (página 58 del DigiCompEdu)
Utilizar tecnologías digitales para apoyar el aprendizaje autorregulado de los alumnos, es decir, para permitirles planificar, monitorear y reflexionar sobre su propio aprendizaje, proporcionar evidencia de progreso, compartir ideas y encontrar soluciones creativas.